La provincia de Córdoba enfrenta una situación crítica con tres focos de incendio activos que han arrasado más de 10.000 hectáreas. Los bomberos y brigadistas llevan cuatro días consecutivos intentando sofocar las llamas que continúan afectando a Villa Berna, Salsacate y Capilla del Monte.
Durante la madrugada del domingo, las autoridades informaron que en Capilla del Monte, uno de los focos más grandes, se había logrado controlar parcialmente el fuego. Sin embargo, las unidades siguen en guardia debido a los riesgos latentes. Los otros focos, localizados en Villa Berna y Salsacate, presentaron una reducción en la intensidad por el cambio en la dirección del viento, pero el aumento de la temperatura durante el día reavivó las llamas en ambos lugares.
El portavoz del gobierno provincial, Roberto Schreiner, señaló que se ha trabajado intensamente con apoyo de aviones hidrantes, y aunque la situación en Capilla del Monte está más controlada, los incendios en Villa Berna y Salsacate son aún una amenaza significativa. Más de un centenar de personas han sido evacuadas y, según los primeros informes, unas 20 viviendas resultaron destruidas por el fuego.
Investigación en marcha y detenidos
Hasta el momento, las autoridades han detenido a dos personas sospechadas de iniciar los incendios. El primero, un hombre de 31 años, fue arrestado en Capilla del Monte con un bidón de combustible en su posesión, mientras que el segundo, un joven de 19 años, fue acusado de provocar el fuego en la misma localidad. Ambos enfrentan cargos por incendio doloso.
El gobernador Martín Llaryora anunció que la provincia se presentará como querellante en la causa que investiga los hechos. En sus declaraciones, Llaryora fue enfático al destacar que la mayoría de los incendios recientes no son accidentales, sino provocados por negligencia o intencionalidad, y pidió sanciones ejemplares para los responsables.
Impacto y demanda de ayuda nacional
Los vecinos de las zonas afectadas, especialmente en el Valle de Punilla, continúan exigiendo que se declare la emergencia nacional debido a la magnitud del desastre y solicitan mayor apoyo del Gobierno Nacional. A pesar de los esfuerzos locales, las condiciones climáticas sin lluvias complican las tareas de contención.
En cuanto a la situación vial, varias rutas permanecen cortadas como medida preventiva, incluyendo la ruta provincial S-273 y tramos de la ruta nacional 38. Las autoridades continúan desviando el tránsito para garantizar la seguridad de los conductores.
El 2024 ya ha sido catalogado como el quinto año consecutivo de grandes incendios en Córdoba. Las cifras estiman que más de 40.000 hectáreas han sido consumidas por el fuego desde que comenzó el año, acumulando una devastación similar a la de los años anteriores, cuando las llamas arrasaron más de 200.000 hectáreas entre 2020 y 2023.
Bomberos y expertos en manejo de incendios destacan que dos regiones de Córdoba, el Gran Córdoba y el norte del Valle de Punilla, son zonas donde el fuego se ha iniciado con mayor frecuencia, generando sospechas y reclamos por parte de la comunidad para que se esclarezcan las causas recurrentes de los siniestros.