El peronismo de Reconquista celebró este domingo una victoria que ya se inscribe como histórica: Juan Pablo Suligoy, ahora concejal electo, se impuso con 10.147 votos sobre el radical libertario Walter Kreni, que reunió 8.462 sufragios. De este modo, el oficialismo logró ganar elecciones intermedias siendo gobierno municipal por primera vez en 28 años, una hazaña que no ocurría desde la gestión de Alfredo Speratti en 1993, marcando un punto de inflexión en el panorama político local.
La contundente performance electoral le permitió al peronismo asegurarse dos de las cinco bancas que se renovaban en el Concejo Municipal. Suligoy estará acompañado por Constanza Arzamendia, quien también integraba la lista ganadora, consolidando así un fuerte regreso del oficialismo al centro de la escena legislativa.
La jornada electoral también marcó un retroceso importante para el radicalismo, que venía de un prolongado dominio en la composición legislativa local. La UCR perdió dos de las tres bancas que ponía en juego: la primera fue arrebatada en la pasada interna por el socialismo, que hoy ratificó su crecimiento al consagrar a Marisa Flores como concejal electa; la segunda quedó en manos de Daniel Bailat, representante del espacio Somos Vida y Libertad, que con un desempeño impecable se metió en el Concejo. El radicalismo, de este modo, solo pudo retener la banca de Walter Kreni, quien pese a la derrota en el mano a mano con Suligoy mantendrá representación parlamentaria por los próximos cuatro años, pero con un poder notablemente disminuido.
El Concejo Municipal de Reconquista quedará integrado por dos representantes del peronismo, un edil radical, una socialista y un concejal de Somos Vida. Esta reubicacion cambia de manera significativa el equilibrio de fuerzas locales y anticipa un período de mayor debate y pluralidad política, poniendo fin a la hegemonía radical en el recinto deliberativo. Para muchos, este resultado no solo refleja el desgaste de la UCR, sino también el reposicionamiento del peronismo en la escena política reconquistense.
La elección deja al oficialismo con aire renovado de cara al futuro y obliga a la oposición a reconfigurar estrategias tras una jornada electoral que quedará en los libros de historia local.