La firma atraviesa una de sus peores crisis, con 250 operarios en riesgo de perder su trabajo, mientras sindicato y empresa negocian ajustes para mantener la fuente laboral.
La planta de Arlei S.A., ubicada en Las Toscas, evaluó que 250 operarios “sobran” por la caída de la producción. Para sostener la actividad y evitar despidos masivos, se analiza trabajar solo con dos turnos —de 4 a 12 y de 12 a 20— suspendiendo el turno nocturno de 20 a 4, durante los meses de noviembre, diciembre y enero.
Vacaciones anticipadas y suspensiones rotativas
Otra medida en estudio es detener la producción durante las dos últimas semanas de diciembre y la primera de enero, otorgando vacaciones a la totalidad del personal. Además, se propone un régimen de suspensiones rotativas, donde cada trabajador cumpliría tres semanas de trabajo y una semana suspendido, intentando equilibrar la carga laboral y minimizar los despidos.
Negociaciones sindicales y búsqueda de consenso
El sindicato mantiene un diálogo permanente con la empresa, buscando alternativas que reduzcan el impacto social y económico, tanto para las familias afectadas como para la economía regional. La situación genera incertidumbre entre los trabajadores, pero también un mayor compromiso por cuidar sus fuentes de trabajo en medio de esta crisis.
Impacto mediático y económico
La compleja situación de la empresa se vio agravada por ataques mediáticos e institucionales que afectaron la percepción de clientes internacionales y locales, provocando una caída en la producción y, consecuentemente, en la cantidad de turnos y salarios. La pérdida mensual estimada de circulante podría alcanzar $250.000, afectando directamente a las familias y al comercio regional vinculado a la planta.
FUENTE: Info Nea – Avellaneda 24