Reconquista, Santa Fe – El Gobierno Provincial ha reactivado la figura del Guardafaunas en la zona ribereña de Reconquista y sus islas, designando a Héctor Hugo Marcos para intensificar los controles y la concientización sobre la crítica situación de los recursos hídricos y pesqueros del Paraná.
Marcos asumió el rol con un mensaje de urgencia, subrayando la falta de conciencia ante el daño ambiental exacerbado por las recientes sequías.
“Tenemos que ser concientes de qué está pasando en nuestros ríos, todos tenemos que ser concientes de esta situación, tuvimos grandes sequías que cambiaron todo… la gente no toma conciencia de que estamos haciendo un desastre en el río,” expresó el flamante Guardafaunas.
El nuevo responsable de la custodia ambiental no dudó en señalar las consecuencias de la falta de fiscalización previa. Marcos afirmó que, debido a la interrupción de sus tareas por un año y medio, “nadie hizo controles” y la gente “hace un desastre”.
Uno de los mayores desafíos, según Marcos, es cambiar la mentalidad de los pescadores, quienes rara vez respetan las vedas o la pesca con devolución (captura y suelta), práctica vital para la recuperación de especies emblemáticas como el surubí y el dorado.
“La gente saca un surubí y lo va a traer, es muy difícil que la gente devuelva un surubí o un dorado,” lamentó, aludiendo a la extracción indiscriminada de ejemplares.
Controles Conjuntos y Prioridad en la Educación
Para llevar adelante su tarea, Marcos adelantó que los controles se realizarán de manera articulada con fuerzas de seguridad federales y provinciales.
“Los controles serán con Prefectura Argentina o con la Guardia de Seguridad Rural Los Pumas, quienes son los que me van a acompañar para realizar los controles,” enfatizó.
Finalmente, el Guardafaunas hizo un llamado a la responsabilidad colectiva, priorizando el enfoque educativo en su gestión: “Lo que queremos es que la gente cuide el recurso, porque es lo que le vamos a dejar a nuestros hijos.” Con esta misión, se busca no solo sancionar infracciones, sino también generar un cambio cultural en la relación de la comunidad con el ecosistema fluvial.

