Cuando no se quiere o no se puede.
Hace aproximadamente 30 días hablamos sobre la imperiosa necesidad de terminar de una buena vez con el robo de cables. Advertimos al poder POLITICO Y JUDICIAL de lo que estaba ocurriendo, nos reunimos con ellos, pero hasta hoy nada cambió.
Notamos una profundización de los hechos delictivos, que no solo son un perjuicio
económico para nuestra institución, sino que conlleva implícito una perdida en la
prestación del servicio y la queja lógica de los usuarios.
Dijimos estar hartos de los robos, también que quienes lo realizan muchas veces lo hacen para ganarse unos mangos fácilmente. Y decimos fácilmente porque hay quienes compran a precio vil (hablamos de los reducidores). Hacia ellos la mirada del estado y del poder judicial parece no posarse.
Somos los vecinos y las instituciones que sufrimos las consecuencias de un ESTADO
AUSENTE y un poder judicial con magros resultados y un poder político que parece no querer meterse.
Desde el gobierno se realizó la reforma a la Ley Provincial N° 14.191, reglamentada por el gobernador Perotti a través del decreto N° 1499, en julio de este año, que creó el “Registro Provincial de Acopiadores y Comercializadores de Metales No Ferrosos”, lo que parecía ser la gran solución a un viejo problema, pero nada de esto sirvió para terminar con estos robos que cada día van en aumento.
Solicitamos a los distintos poderes del estado provincial que de una vez por todas tomen cartas en el asunto y dejen de mirar al costado cuando ocurren estos hechos delictivos, brindándonos la seguridad que nos merecemos quienes vivimos en esta geografía del norte provincial. Esperamos respuestas que no se han dado.
Consejo de Administración Cooperativa de Servicios
Públicos Sociales y Viviendas de Avellaneda Ltda.-